Supuesto caso de corrupción en Turismo de Brasil

EXPRESO - 10.08.2011

Frederico Silva da Costa, viceministro de Turismo de Brasil y 34 funcionarios más han sido arrestados en una acusación sobre desvío de fondos públicos relacionados con la industria de viajes.

Se presume la derivación de 3 millones de reales en un convenio de calificación de profesionales de turismo como fruto de una conclusión a la que se llegó después de cuatro meses de investigación.

Entre los detenidos figuran también el Secretario Nacional de Programas de Desarrollo de Turismo, el ex diputado Colbert Martins da Silva Filho, y el ex presidente del Instituto Brasileño de Turismo –Embratur- Mario Moisés, entre otros.

El ministro de Turismo, Pedro Novais Lima, ha sido llamado al palacio presidencial para dar explicaciones. Se cree que con este escándalo Dilma Rousseff perdería a un cuarto ministro, también por acusaciones de corrupción.

El Viceministro de Turismo podría tener más casos que lo hacen altamente sospechoso de corrupción. El diario O Globo recuerda que cuando perteneció a Sudam (Superintendência do Desenvolvimento da Amazônia) recibió acusaciones de favorecer a una empresa de su familia y de cometer irregularidades en la gestión de convenios federales.

Para O Globo pasó ocho años blindado de las denuncias y gozando de puestos importantes en el Ministerio de Turismo, gracias al apoyo de las bancadas de diversos partidos en el Congreso. Frederico Silva tuvo varias funciones relacionadas a turismo: Diretoria del Departamento de Financiamento e Promoção de Investimentos; en el 2007 fue promovido a la Diretoria de Programas Regionais de Desenvolvimento do Turismo, y al año siguiente fue Secretário Nacional de Programas de Desenvolvimento do Turismo.

Con todo, las pruebas parten de una relación entre el Ministerio de Turismo e Ibrasi (Instituto Brasileiro de Educação e Responsabilidade Sanitária), una entidad de capacitación profesional sin tener aparentemente las condiciones técnicas para brindar los servicios contratados. La policía de Brasil detectó que el Ministerio de Turismo celebraba contratos sin licitación y por grandes sumas.

Expreso. Redacción. A.R

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