Platicando con Chef Betty (4) Pasión por la Historia

EXPRESO - 05.07.2019

Betty Vázquez, chef de El Delfín, restaurante en el Puerto de San Blas, Riviera Nayarit, México

Nuestro encuentro con Betty Vázquez en Acapulco, donde representaba al destino Riviera Nayarit, coincidió con el momento en que acabábamos de descubrir la primera biografía publicada sobre el marino y explorador español José María Narváez...

Nuestro encuentro con Betty Vázquez en Acapulco, donde representaba al destino Riviera Nayarit, coincidió con el momento en que acabábamos de descubrir (incorporado recientemente a la biblioteca de Expreso) la primera biografía publicada sobre el marino y explorador español José María Narváez (Cádiz, 1768 – Guadalajara, México, 1840), 'Narváez por aguas inexploradas' de Jim McDowell. El nexo estaba a casi 1.200 kilómetros hacia el Norte de México: San Blas, puerto de donde partía Narváez en sus periplos por el Pacífico y, a la vez, lugar de residencia habitual de Chef Betty, la cocinera enamorada de la aviación, el turismo, los viajes, la historia...

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Hemos leído que San Blas fue muy importante durante la etapa colonial, con una historia interesante...

El entorno mágico que tiene San Blas, o toda esa parte de la costa, son pequeñas bahías con mucha madera, lo cual era propicio para hacer allí los astilleros. Y lo que realmente quería la Corona Española era detener la invasión de los rusos que venían bajando por el estrecho de Bering. Traen a un franciscano, que fue fray Junípero Serra, porque la bandera era evangelizar, pero detrás había un motivo político. Lógico, no solamente porque "el continente lo descubrí yo y éste es mi continente", sino porque "no quiero perder el continente ni sus riquezas". Las expediciones se hicieron desde San Blas hacia el Norte. Las costas de México, Estados Unidos y Canadá están repletas de trabajos de franciscanos que fueron haciendo las misiones. Fray Junípero Serra, saliendo de San Blas, hizo 17 de las 24 que hay desde California a Vancouver. Y todo el estrecho para llegar a Vancouver está lleno de islitas con nombres muy, muy españoles. Y la historia nos dice que no sólo había una riqueza natural, había también una riqueza en hombres pensantes. Se fue evolucionando, tuvimos en su momento embajadas de Alemania, Inglaterra, Francia y España, además de consulado italiano. San Blas llegó a tener 120.000 habitantes y era más grande que Tepic. Todo por el comercio, porque era lugar de entrada y salida de productos importantes y caros. Tres cuartas partes de la plata circulante en la Colonia salió por San Blas.

Aunque no era el único puerto del Pacífico que estaba comunicado con las Filipinas...

El comercio con Asia se hizo antes por Acapulco, después por Manzanillo y, por último, San Blas. Acapulco pierde su liderazgo porque en una época el gobernador (o el lider del Gobierno de la zona de Guerrero) se puso mal con el emperador; entonces lo cesa y a partir de ahí el comercio se va a hacer por San Blas. En esa última etapa comercial fue cuando salió más plata del país. Imagínate el pago de impuestos que había. Hay un edificio hermosísimo en el Fuerte, que le decimos 'la contaduría', que era la aduana, donde pagaban las regalías de salida y de entrada de cada producto de cada barco. Hubo piratas, lógico en un comercio de productos caros que eran atractivos para ellos, y eso va haciendo un entorno bastante rico para las fantasías. Del mundo de los piratas se dice muchas cosas, pero también eran necesarios, porque había problemas que no se solucionaban en el Gobierno...

Buena atmósfera para entreverar historias y leyendas...

Nosotros nos independizamos en 1810, aunque el reto era independizarse en 1811, pero descubrieron a los organizadores y tuvieron que adelantar la fecha, por lo cual no estaban perfectamente organizados... Era un sacerdote del centro del país el que estaba planificando el ajuste de independencia y le habla al "padre" del Puerto de San Blas: "oye, si no nos movemos nos vamos a matar y no vamos a lograr nada, pero tu tienes cañones en el puerto, por favor, échame una mano..." El padre de la patria, o de la independencia, es Miguel Hidalgo y el cura (de mi pueblo en su momento) es el cura Mercado; él ayudó llevando cañones a la parte central del país para la primera batalla de la guerra de independencia, que fue el 15 de septiembre del 1810, cuando estaba planeada para un año después. De San Blas vas a tener muchísima información, porque en el conflicto con EEUU en 1857 nuevamente el heroico batallón de San Blas es el que lucha en el Castillo de Chapultepec contra la invasión de los del Norte. Trataban de invadir el país por cuestiones políticas pero sobre todo económicas. La primera defensa fuerte que se hace de esta invasión fue en el Castillo de Chapultepec, en donde los cadetes destacados fueron los del heroico batallón de San Blas. Si visitas ese Castillo, que es una joyita en el centro de México, verás que la única sala del museo que está custodiada las 24 horas es donde está la bandera y el recuerdo al acto heroico de esa fecha, que se conserva bastante bien.

O sea que San Blas es importante en la Historia de México...

Históricamente hay muchas cosas que tenemos que decir de San Blas, que ha estado vinculada a gente del arte, de la historia..., que ha luchado por los derechos de la gente. A lo mejor has oído hablar de Emiliano Zapata..., una persona que se dedicó a defender al trabajador del campo diciendo que ya no queremos grandes hacendados, queremos que la tierra se reparta y sea de quien la trabaja. En el Estado de Nayarit hay un personaje que se llama Manuel Lozada, el tigre de Álica, que fue precursor en esas reivindicaciones del campesinado, antes de que naciese Zapata. La historia de Lozada, que en realidad se llamaba Manuel García González, parece una leyenda por lo controvertida y novelesca, pero es un capítulo fundamental en la historia de Nayarit, ya que él fue quien logró de Juárez la separación de Jalisco y el reconocimiento como nuevo Estado. Lozada pasó de bandido a defensor de los campesinos, sobre todo coras (tribu a la que pertenecía) y huicholes; tuvo parte en la guerra de dos clanes de comerciantes de San Blas que se disputaban el comercio de los bienes que transportaba el Galeón de Manila; fue general del ejército de Maximiliano y condecorado por Napoleón III; se le considera artífice indirecto del nacimiento de Nayarit y al final fue traicionado y fusilado en 1873 cuando tenía 45 años.

Nos pasaríamos horas escuchando las apasionadas historias de Betty, que son la Historia de su pueblo; pero, después de tanta plática, todavía no hemos hablado de sus platos, de sabores concretos.

(Se lo contamos en la próxima plática).

Texto y fotos: Manolo Bustabad Rapa