Hotel Higuerón Málaga, una sorpresa en la Costa del Sol

El Hotel Higuerón Curio Collection by Hilton es un alojamiento sorprendente. Asomado al Mediterráneo en pleno corazón de la Costa del Sol, se sitúa en la falda de una montaña justo en el límite entre los municipios de Fuengirola y Benalmádena.

Lo firma Higuerón Resort, una empresa española especializada en desarrollos urbanísticos exclusivos, donde el entorno natural es tan importante como el espacio en sí y eso se nota en que en este hotel los detalles están muy cuidados. Nada más llegar se agradece la copa de champán que te ofrecen de bienvenida.

Es un lugar repleto de obras de arte que te sorprenden en cada rincón, y su arquitectura de aire hospitalario -con una señalética original aunque de dudosa eficacia- resulta al fin agradable porque integra los materiales y colores de esta zona del sur de España.

La vista al mar es un poco lejana pero intensa desde la altura de esta ladera que antaño estuvo plagada de higueras y de ahí el nombre del complejo. El azul enmarca el conjunto desde cualquier punto del hotel. En la planta más alta, los azules son tres: el del cielo, el del Mediterráneo y el de la preciosa piscina de borde infinito, junto a uno de los restaurantes y rodeada de camas balinesas.

La empinadísima cuesta que separa el hotel de la playa se resuelve eficazmente con un servicio gratuito de lanzadera que une durante todo el día el complejo con el Beach Club, donde también se pueden saborear creaciones de Diego Gallegos, pasando por la estación de tren de cercanías, por lo que resulta muy cómodo el acceso.

Los huéspedes pueden disfrutar también de dos innovadores centros de bienestar, el Higuerón Spa y el Sport Club, para cuidar la mente y cuerpo, además del nuevo The Beach Club y el Higuerón Yachts, que es el único concesionario De Antonio Yachts en Andalucía que también dispone de la opción de alquiler.

Merece la pena madrugar para disfrutar la terraza del Med y desayunar rodeado de vegetación mediterránea. Más tarde, esta agradable experiencia salpicada de naranjos, olivos, vides, granados, cipreses e higueras que rodea la piscina Med se puede repetir comiendo o cenando en este mismo restaurante.

Pero mejor de la variedad gastronómica del hotel es Sollo, donde el chef Diego Gallegos hace magia de producción propia con la acuaponía de su restaurante estrella Michelin, estrella Verde y dos soles Repsol. Hay que reservar con casi un mes de antelación, ya que la demanda es muy alta, pero la interesante experiencia comienza con una explicación personalizada por el propio cocinero y merece la pena. Su cocina se basa en pescados de río y caviar de cocina única y solo sirve menús de degustación para la cena.

El mismo Diego Gallegos cambia de vez en cuando de cocina para hacer travesuras gastronómicas en el colorido y divertido restaurante Arara, su hermano pequeño, donde consigue transportarte con sus sabores a su Hispanoamérica natal.

Es un punto muy positivo encontrar las amenities de Rituals para el baño y las cafeteras Nespresso, tanto en las habitaciones como en el desayuno.

El afán innovador y seguramente la inexperiencia viajera del arquitecto hace que se echen de menos algunas comodidades obvias en los cuartos más sencillos, como que las llaves de la luz estén correctamente ubicadas o haya superficies horizontales donde dejar un momento las cosas, un detalle que agradecerían los huéspedes que necesitan trabajar.

Eso sí, el Hotel Higuerón Curio Collection by Hilton cuenta con capacidad para reuniones y eventos desde 25 a más de 1.000 invitados, con equipos audiovisuales integrados perfectos para celebrar desde pequeñas reuniones de negocios a conferencias, banquetes, lanzamiento de productos o, incluso, una boda especial.

Texto y fotos: Federico Ruiz de Andrés y Ana Bustabad Alonso