Epicureísmo a la mexicana, sólo en Guanajuato

Con un clima cálido privilegiado y una posición estratégica en el centro del país, el estado de Guanajuato es el destino por excelencia para el sibarita contemporáneo.  

Una nueva definición de bienestar aguarda al visitante en los hoteles, ex haciendas y spas de la región, con delicadas aguas termales, un clima regenerador y profesionales de la hostelería siempre listos para hacer de cada visita una gran experiencia.  

Un suelo fértil y abundante luz solar hacen de Guanajuato un destino mexicano de enoturismo. Más de 15 opciones de haciendas y hoteles vinícolas nos esperan para la cata de vinos artesanales y orgánicos de la región, el maridaje perfecto para la rica gastronomía local.    

El estado mexicano de Guanajuato no sólo es sinónimo de cultura e historia, pero también de lujo y relajación: sus callejuelas adoquinadas guardan la memoria de aquel esplendor desbordante de oro, plata y piedras preciosas que alguna vez brotaron de sus minas y que hoy hacen eco en sus hoteles de lujo, restaurantes, spas de aguas termales, cabalgatas en la naturaleza o a través de las rutas naturales del vino.    

Si es calma lo que necesitamos, no hay mejor lugar en el centro de México que el Pueblo Mágico de Mineral de Pozos: Anteriormente un pueblo “fantasma” (y ahora lleno de vida) a una hora de Dolores Hidalgo y de San Miguel de Allende, al noreste del estado. Este encantador Pueblo Mágico es un destino ideal para quienes echan a andar con cámara en mano y buscan descubrirse en el sonido de sus propios pasos.

Las oportunidades gastronómicas están a la orden del día en el pueblo y hay que probar el colonche, que es un fruto fermentado; los tacos de escamoles, las deliciosas larvas de hormiga y, en temporada, los famosos (y deliciosos) gusanos del maguey.   

Por la noche, nos aguardan hoteles boutique que comprenden nuestra necesidad de calma y comfort, como el Loft Boutique Mineral del Cielo, donde puedes quedarte en un espectacular loft de piedra o el Hotel Boutique Casa Diamante, donde, además de las amenidades usuales, se ofrece un tratamiento de baño en cerveza que promete regenerar la piel con su aporte de vitamina B y proteínas.

Se trata de una experiencia total pues su corolario es disfrutar una de sus cervezas artesanales premium que son un deleite para los más exigentes.              

La oferta enoturística del estado de Guanajuato, es en realidad uno de los secretos mejor guardados del estado.

Se trata de recintos vinícolas de los más altos vuelos, con una producción de más de 300 mil botellas al año y que se concentran cerca de importantes ciudades como San Miguel de Allende, Salvatierra, León y su ciudad capital, también llamada Guanajuato.   

Lanzamiento de la Ruta del Vino Guanajuato ‘Valle de la Independencia’

La Ruta del Vino ‘Valle de la Independencia’ - Guanajuato te permite descubrir las memorias históricas de la Vid en Guanajuato explorando la hermosa ciudad patrimonio de la Humanidad de San Miguel de allende y recorriendo los Pueblos Mágicos de Dolores Hidalgo y Comonfort.

Esta Ruta del Vino tiene como valor diferencial la integración de la oferta turística de los destinos: En un recorrido de 77 kilómetros el visitante podrá elegir un abanico de por lo menos 300 opciones no sólo vinícolas, sino de hospedaje, gastronómica, wellnes, culturales entre varias otras.    

Cerca de la ciudad capital se encuentra precisamente uno de los viñedos más altos del mundo (ubicado a casi 2 mil 5 metros sobre el nivel del mar) con las mejores vistas de la región.

El viñedo Camino de Vinos, forma parte de la Ex Hacienda Jesús María, un hotel que compagina la arquitectura de piedra de principios de siglo XX, con terrazas y cuerpos de agua, donde la vista se pierde en la inmensidad de la sierra.

Más hacia el este, cerca de San Miguel de Allende, existen algunos viñedos de cientos de hectáreas donde la cata de vinos se conjuga con spas y estancias privadas, perfecto para viajeros que necesitan poner una pausa al ruido del mundo.   

En esta tesitura encontramos los viñedos La Santísima Trinidad y San Francisco, donde la estancia puede incluir, además de la cata maridada con queso y aceite de oliva; un delicioso masaje en el spa, clases de yoga, de equitación y de polo.

Entre otros viñedos interesantes en la región se encuentran entre muchos otros, los Viñedos Azteca, Viñedos Cuna de Tierra, Hacienda San José Lavista o Viñedo Bodega Dos Búhos, este último con botellas de Cabernet Franc capaces de regresarnos el gusto por la textura y la delicadeza del vino.   

Después de disfrutar el cálido sol de los viñedos se antoja dejarse seducir por las aguas termales, los masajes y los tratamientos detox en la hermosa ciudad de San Miguel de Allende.

Aquí nos esperan lugares como La Gruta, un balneario y spa donde las albercas son de aguas termales que pueden alcanzar los 40 grados centígrados y que, se dice, tienen propiedades medicinales por la gran cantidad de azufre, magnesio, hierro y calcio contenida en el agua.

Ahora bien, si lo que se busca es ponerse en manos de profesionales, no hay que dejar pasar la oportunidad de acudir a alguna casa de masajes de prestigio (como Essential Massage & Watsu o Esencia Yoga Spa, por ejemplo) donde se puede transformar el cuerpo a través de un masaje sueco, uno de tejido profundo, o hasta recibir una terapia Watsu (en el agua).   

Con esta variada oferta de viajes de experiencia, gastronómicos y enológicos (además de su cercanía estratégica a destinos de playa) el estado de Guanajuato se erige como la región donde el lujo no se esconde y una especie de calma exuberante regresa a los visitantes.

Expreso. Redacción. A.F