Se abre al público el castillo de los templarios de Lérida

El Ayuntamiento de Lérida abrirá al público uno de sus monumentos más interesantes y a la vez más desconocidos, el castillo de los Templarios. La fortaleza medieval, junto con el Centro de Interpretación de la Orden del Temple -que se ha instalado en el edificio para divulgar la oferta monumental y cultural de este espacio y la historia de esta poderosa orden-, se podrán visitar a partir del 5 de mayo.

Con el objetivo de dar a conocer el centro de interpretación, Turismo de  Lérida ha programado para los días 11, 12 y 13 de mayo unas jornadas de puertas abiertas. Las instalaciones tendrán dos espacios destinados a albergar actividades culturales de la ciudad de Lérida.

La Paeria ha habilitado junto al castillo un punto de interés turístico y organizará visitas guiadas en cinco idiomas: catalán, castellano, francés, inglés y japonés.

El origen del monumento se remonta a la conquista de la ciudad a los árabes en 1149, cuando los templarios recibieron varios bienes en compensación por la ayuda prestada en el asedio, entre los cuales se incluía la colina de Gardeny. La primera referencia sobre la petición de Gardeny está fechada en 1156. A pesar de que en los siglos XVII y XVIII se realizaron profundas modificaciones que alteraron la fisonomía de la obra medieval, actualmente todavía se conservan importantes vestigios del conjunto templario original.

Por otra parte, la Generalitat de Cataluña inaugurará este año la nueva oficina turística de la Seu Vella (catedral antigua), el monumento más emblemático de la ciudad de Lérida.

El nuevo servicio, destinado a potenciar las visitas turísticas a la Seu Vella y al municipio en general, se plantea también como centro de acogida en el que se informará a los visitantes sobre la oferta turística de toda la demarcación leridana. También se podrá adquirir allí productos artesanos o de diseño elaborados en Lérida.

Recientemente declarada por elección popular "Primera Maravilla del Patrimonio Cultural Material de Cataluña", la Seu Vella está situada en la colina central de la capital de Lérida, desde donde se domina toda la ciudad y gran parte de la huerta.

Las obras de construcción de la iglesia se iniciaron en 1203 y el templo fue consagrado al culto en el año 1278. En el siglo XIV se terminó el claustro. Es una construcción de transición entre el románico y el gótico, en la que destaca el magnífico claustro-mirador sobre la ciudad.