De vinos, con Talonotel

EXPRESO - 26.05.2007

Entender de vinos está de moda y las mejores bodegas de España se han apuntado al nuevo turismo enológico a la vez que Talonotel que continú incorporando nuevas bodegas a sus propuestas de uso alternativo de los talones hoteleros.

A las Bodegas Arzuaga, se unen ahora las bodegas Emina de Peñafiel (Valladolid) y el hotel Ribera del Duero desde el que se organizan visitas a varias bodegas de la zona. Los talones permiten reservar escapadas enológicas que van desde la simple reserva en los hoteles de la zona, hasta talleres de cata de vinos o comidas típicas regadas por los mejores caldos de Ribera del Duero.

En Bodegas Arzuaga, Quintanilla de Onésimo (Valladolid -España), Talonotel propone una excursión de dos días a las bodegas, por tres talones, incluyendo una noche en el hotel Arzuaga, de cinco estrellas, desayuno mediterráneo a la carta y taller de iniciación a la cata de vinos para conocer las claves fundamentales para sentir y percibir los matices del vino. La degustación incluye cuatro vinos de su bodega.  Blanco Fan D. Oro Arzuaga, Tinto "La Planta" Arzuaga, Tinto Arzuaga  Crianza, Tinto Arzuaga Rerserva.

En las Bodegas Emina de Peñafiel (Valladolid), por un talón, se puede disfrutar de un curso de cata, una comida maridada y regalos consistentes en una botella de aceite y una botella de Emina Rueda.  La visita está prevista para pequeños grupos y permitirá catar hasta unos diez vinos diferentes.

En el hotel Ribera del Duero de Peñafiel, se proponen planes diferentes: Por un talón (60 euros)  por habitación doble, nos podremos alojar en el hotel Ribera del Duero, instalado en una antigua fábrica de harinas del siglo XXI, un alojamiento perfecto para un fin de semana enológico.

Otra opción es reservar un paquete. Hay dos modalidades: por dos talones (120 euros) que incluye una noche de alojamiento, una visita a una bodega de la zona, y una comida para degustar el lechazo típico de la zona.

El Paquete 2 incluye dos noches de alojamiento con desayuno, una visita a dos bodegas (una de ellas con cata y aperitivo) y una comida típica a base de lechazo. Todo por cuatro talones. 

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