Copenhague se postula como mejor ciudad en bici

Uno de los mayores reclamos turísticos de Copenhague es la vista de la que se puede disfrutar desde la bicicleta. Aunque en la actualidad quienes visitan Copenhague ya pueden disfrutar de la ciudad sobre dos ruedas, la capital danesa quiere seguir desarrollando y ampliando su ‘cultura de la bicicleta' y conseguir que en 2015 sea la ciudad más cómoda del mundo para ir en bici.

En la actualidad el 36% de daneses utilizan ya este medio de transporte en sus desplazamientos diarios, uno de los porcentajes más altos del mundo. El objetivo de Copenhague para 2015 es aumentar esta cifra hasta el 50%.

Esta es una de las metas del plan medioambiental de la capital danesa, Eco-Metropole Our Vision 2015, que, junto a otras iniciativas ecologistas, trabaja para que ese año la ciudad se convierta en la más cómoda del mundo para viajar en bicicleta.

Entre 2007 y 2009, el proyecto destina 150 millones de coronas para la creación de aparcamientos para bicicletas, rutas verdes y nuevos carriles bici, así como para incrementar la seguridad de los usuarios.

Actualmente ya existen muchas vías para circular con seguridad sobre dos ruedas. En los últimos 100 años, se han construido en la capital más de 300 km de carriles habilitados y otros 50 están ya proyectados. También se están habilitando rutas verdes a través de toda la ciudad para asegurar a los ciclistas un transporte ecológico y seguro.

Dentro de poco, Copenhague contará con muchas rutas conectadas para poder circular cómodamente en bicicleta por toda su área metropolitana. En este proyecto se incluye además un puente para bicicletas y transeúntes sobre Aagade.

Aunque hay muy pocos sitios en el mundo que dispongan de semáforos específicos para ciclistas, en Copenhague es posible encontrarlos en los lugares con mayor densidad de tráfico.

Por ejemplo, en Norrebrogade la señalización funciona durante las ‘horas punta', permitiendo que aproximadamente 30.000 ciclistas circulen de forma rápida y segura por los carriles-bici de la ciudad, una medida que será ampliada a otras áreas. También el transporte público en el país se ha adaptado perfectamente a la cultura de la bicicleta y ya es posible viajar en  metro y tren gracias a los espacios especialmente habilitados para ellas.

La capital danesa quiere compartir con los turistas su cultura de las dos ruedas, para lo que pone a disposición del visitante bicicletas con las que disfrutar de Copenhague de forma gratuita, tan sólo realizando un depósito de 20 coronas. Con más de 110 estaciones vigiladas, siempre es posible encontrar cerca una bicicleta en las mejores condiciones.

La mayoría de los hoteles también ofrece la posibilidad a sus huéspedes de alquilar bicicletas. Otra interesante opción es realizar una ruta por la ciudad con un guía personal, una buena alternativa para conocer el entorno. Se trata de una forma activa y diferente de disfrutar de la vida de la ciudad y de su arquitectura.

Empresas como Copenhague Tours o City Safari organizan rutas turísticas con una duración de entre 2 horas y media y 4 horas y media.