El Barceló Hamilton nos descubre el mejor mes para visitar Menorca

EXPRESO - 31.07.2012

Expreso

Desde el Barceló Hamilton Menorca, uno de los hoteles más atractivos de la isla balear, nos recuerdan que septiembre es uno de los mejores meses para viajar a este destino español tan atractivo, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO.
¿Las razones? Que septiembre es un mes con menor afluencia de turistas, que permite conocer más tranquilamente los destinos y disfrutar de unos precios más baratos; y que el clima es mejor, ya que hace menos calor pero todavía se tiene la sensación de que es verano.
El Barceló Hamilton Menorca nos aconseja, además, algunas visitas imprescindibles por la isla, como el poblado de pescadores de Binibeca; playitas preciosas como la Cala Sant Esteve, Cala en Portet, Cala Algairens, el mirador de Cala Morell y Cala Mesquida, entre muchas otras, y excursiones por algunos de sus pueblos y ciudades como Fornells, Ferreries, dónde se encuentra la fábrica de Jaime Mascaró dónde se elaboran artesanalmente las conocidas ‘Pretty Ballerinas’ tan de moda entre las ‘celebrities’.
Tampoco hay que perderse una ruta por la señorial Ciutadella y por la capital, Mahón, que del 7 al 9 de septiembre celebra sus fiestas patronales en honor a la Virgen de Gracia en el puerto.
Los clientes que se alojen en este nuevo ‘Urban Beach’ hotel para adultos, remodelado recientemente, podrán alternar sus visitas por la isla con deliciosas cenas en el restaurante Sa Cova; cócteles bajo la luz de la luna y con impresionantes vistas del puerto de Mahón en su Blue Sky Bar y relajantes tratamientos en su acogedor centro U Wellness.
Con 155 habitaciones, el Barceló Hamilton Menorca disfruta de una privilegiada ubicación frente a la bocana del puerto de Mahón, por lo que ya sea desde su terraza exterior, o desde su azotea, uno siente que puede tocar los mástiles de los barcos que navegan frente a él.
Uno de sus espacios muy especiales es el restaurante Sa Cova, regentado por el chef del hotel Francisco Garrido, ubicado en una de las antiguas cuevas que se incrustan naturalmente a lo largo de todo el litoral del puerto de Mahón.
El servicio se presta en la terraza sobre el paseo marítimo, donde hay que probar sin falta su caldereta de langosta, una receta incluida hace unos años en el libro ‘Las 20 joyas de la cocina española’ de Alejandro Pintó Sala.
La azotea del Barceló Hamilton Menorca cumple una doble función. De día sirve de solárium a los clientes que buscan tomar el sol, disfrutando de unas vistas espectaculares, y remojarse en sus dos jacuzzis mientras toman un refresco. Y de noche se viste de gala para convertirse en el Blue Sky Bar, un local de copas con las mejores vistas de todo el puerto donde disfrutar de una amplia selección de cócteles, gins y licores Premium.

Expreso. Redacción. P.A. 

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