Bárcena Mayor, uno de los pueblos más bonitos de España

EXPRESO - 31.03.2015

Cantabria_BarcenaBárcena Mayor es la última incorporación a Los Pueblos más Bonitos de España, club que está formado ya por 35 localidades de nuestro país, dos de ellas de Cantabria, concretamente Bárcena Mayor y Santillana del Mar.

El reconocimiento a Bárcena Mayor ha sido concedido por su valor etnográfico, artístico e histórico. Se trata de una de las joyas cántabras más destacadas que, además, se encuentra en un lugar de excepción: el Parque Natural Saja-Besaya.
Está situada a 500 metros sobre el nivel del mar y a ella se accede por la carretera que atraviesa el valle de Cabuérniga o bien desde la zona de Campoo a través del Puerto de Palombera.
Bárcena Mayor se encuentra a orillas del río Argoza, que le atraviesa y el que es posible cruzar a través de un antiguo puente de piedra. La aldea conserva aún el ambiente típico de su remoto origen, que algunos datan en el siglo IX. Situado entre montañas y en zona de tránsito entre el valle y la meseta, todavía quedan restos de la antigua calzada romana, aunque los primeros datos históricos se remontan a la Edad Media. 
El peculiar conjunto arquitectónico de Bárcena Mayor es muy concentrado y denso y tiene una estructura rectangular. El pueblo está atravesado por dos calles principales de este a oeste y varias callejas perpendiculares; dentro del conjunto hay varias plazas y en una de ellas un antiguo lavadero, donde hasta no hace muchos años aún se podía ver a las mujeres de la aldea con las grandes palanganas de zinc llenas de ropa. 
La vivienda típica es la casa montañesa de piedra, mampostería y madera. Las fachadas se orientan al sur o al este, destacando algunos soportales con arcos de sillares y sobre todo la talla en madera con decoración en vigas, pilares, aleros...
La iglesia de Santa María es del siglo XVII y en ella destaca el retablo barroco-decorativo del XVIII.
A las afueras del pueblo, monte arriba, existe una pequeña ermita dedicada a la Virgen del Carmen. Bárcena Mayor está rodeada de un paraje natural único de bosques, pequeños ríos y praderías, que se pueden recorrer por las diversas sendas que salen desde el pueblo.
En la época estival, es posible darse un chapuzón en alguno de los pozos del río Argoza, de frías y cristalinas aguas. 
Expreso. Redacción. A.F

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