Dormir diferente en Noruega

EXPRESO - 30.10.2014

El alojamiento es una parte fundamental de la experiencia del viaje y en Noruega lo sabemos

Vulkana El alojamiento es una parte fundamental de la experiencia del viaje y en Noruega lo sabemos. Por eso se está fomentando la creación de multitud de alojamientos alternativos donde lo importante es la experiencia.

Las opciones son infinitas: desde una cabaña en un árbol o un camping de lujo hasta un barco aislado en mitad del hielo.

La propuesta se centra en el hecho de dormir diferente para no quedarnos indiferentes. Porque nunca ha sido tan interesante ir de cama en cama.

A continuación, detallamos tan sólo algunas de las muchas opciones propuestas por la Oficina de Turismo de Noruega.

Vulkana, el hotel flotante

El Vulkana, atracado en la ciudad de Tromsø, es un velero de pesca reconvertido en un especial hotel, que no sólo ofrece alojamiento, sino una experiencia completa centrada en el bienestar, con su zona de relax con spa en el casco, su salón Zen, su sauna y jacuzzi exterior y la más rica gastronomía basada en ingredientes autóctonos.

Durante el día el barco se puede utilizar como transporte para conocer la región y realizar actividades como ‘Ski & Sail’ en los Alpes de Lyngen y durante la noche sirve de alojamiento.

Pero quizás el mayor lujo que ofrece Vulkana es poder contemplar las auroras boreales mientras se disfruta En invierno comensales. Y la guinda del pastel al finalizar el día la pone el cielo, pues si las condiciones climatológicas acompañan, se pueden contemplar las auroras boreales mientras se disfruta de un baño de agua caliente en la cubierta.

Durmiendo en una casa en el árbol

¿Quién no ha soñado con dormir en una cabaña en la copa de un árbol? Pues en Noruega es posible y las cabañas de Tre Top Hut en Brumunddal son el lugar ideal para los amantes de la fauna y para los más nostálgicos.

De momento disponen de sólo tres cabañas, pero no es ningún problema para aquellos viajeros que deseen alejarse del bullicio de la ciudad y dejarse llevar por la paz de la naturaleza. Esta atractiva oferta de alojamiento da la posibilidad que desde el nido se divisen alces, amaneceres que quitan el hipo y un sueño profundo de lo más reparador.

Espíritu aventurero a bordo del Noorderlicht

El barco Noorderlicht es el único barco en el mundo que pasa la temporada de invierno atracado en el hielo del Fiordo Tempelfjorden, a tres horas de Longyearbyen, en las salvajes islas Svalbard, donde el número de osos polares supera el de humanos.

Durante los meses de verano navega hasta llegar a Spitsbergen y a finales de Septiembre sigue su rumbo hacia el Norte de Noruega, más concretamente a las islas Lofoten, para así poder avistar orcas desde el mes de Octubre a Diciembre, mes en el que regresa a Svalbard para iniciar su temporada más aventurera en el invierno ártico.

El barco dispone de 10 cabinas dobles y los viajes suelen tener una duración de 7 días, el tiempo perfecto para saborear la parte más salvaje de Noruega.

Cabañas de madera – contacto absoluto con la naturaleza

Sven Engholm es más que el propietario de Engholm Husky Design Lodge, es el creador de cada una de las cabañas de madera.

Él mismo ha construido cada cabaña con la madera y materiales procedentes de las montañas y bosques de los alrededores de Karasjok, en la Laponia Noruega.

También ha diseñado y fabricado los muebles de cada una de las seis cabañas, pero además de todo este trabajo tan artesanal, su ubicación en pleno bosque, alejado de las carreteras y sin vecinos, consigue que la vivencia de estar en contacto con la naturaleza sea absoluta.

Habitación-bodega frente al mar

El Centro Marítimo de Stokkøya, en Trøndelag, es uno de los centros de Noruega más valorados por su diseño, estilo e idea en la distribución del espacio. Ubicado en una pequeña isla de 15 km, muy cerca de Trondheim, Torild y Roar han hecho realidad su sueño levantando un alojamiento en la playa con muchos toques urbanitas.

El edificio está dividido en bloques que conforman las habitaciones, y está construido de hormigón y vidrio. Las habitaciones se diseñaron siguiendo el patrón de las antiguas bodegas naturales, pero cada una de ellas tiene un gran ventanal que da directo a la playa y los muebles son piezas de diseño únicas, introduciendo también muebles reciclados y nuevos diseños de estudiantes de arte noruegos.

La parte trasera del edificio está cubierta por la montaña y césped, logrando así un menor impacto en el paisaje, fusionándose con su entorno natural.

Glamping en Noruega – el camping con glamour

Glamping es un nuevo concepto de vacaciones cada vez más extendido entre aquellos que quieren disfrutar de sus días de descanso rodeado de naturaleza, pero sin dejar a un lado la comodidad de la vida moderna.

Una buena alternativa es el glamuroso Canvas Hotel en Telemark, donde se encuentran 10 yurtas - tiendas de gran tamaño- de estilo mongolí con suelos de madera y cómodas camas, además de bañeras al aire libre para relajarse tras un día de bicicleta o senderismo por las bellas montañas de la zona.

Cabañas de pescadores

Construidas originalmente como alojamiento para los pescadores que acudían a las temporadas de pesca de Lofoten, las cabañas de pescadores gozan hoy de una enorme popularidad, tanto entre los noruegos como entre los turistas extranjeros que acuden de vacaciones.

Alojarse en un rorbu, el nombre que reciben en Noruega, ofrece la experiencia de alojarse en pintorescos pueblos y ciudades pequeñas que se dedican a la pesca, por lo que además de conseguir descansar frente al mar en un paraje inigualable, la oferta gastronómica de la zona cierra un fin de semana muy envidiable.

Sentirse como un mercader del período hanseático en Bergen

El Hotel Hanseático de Bergen se encuentra en Bryggen, el muelle, centro neurálgico de Bergen desde finales de la Edad Media y que recuerda la importancia que tuvo la ciudad como parte del imperio comercial de la Liga Hanseática desde el siglo XIV hasta mediados del XVI.

El hotel es parte de Bryggen y por ello está incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Amueblado al estilo del siglo XVI transporta a sus huéspedes a una época de esplendor para Bergen y, dada la elegancia del edificio de madera, es fácil entender por qué fue hospedaje y restaurante para muchos comerciantes alemanes, holandeses y noruegos durante la liga hanseática.

Expreso. Redacción. T.R

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